El espejo refleja sin juicio

* Siempre que almuerzo donde los Govindas, es inevitable que llegue a mi el recuerdo de mis hijos, pues es recurrente la presencia aquí de algún hermoso infante que me hace profundizar en la memoria*


Memoria de corazón
memoria de vientre
partido en pedacitos.
La soledad del ahora
reclama aquella presencia
incondicional;
ella acaricia el gran
corazón que habita
el cuerpo sublime.

Paso meditado
paso avanza
camino memoria.
destino de pequeños piececillos
curiosidad en supremacía
rompe y acribilla
todos los prejuicios.

Desconocido paraje
al encuentro del conocimiento
interno, profundo, verdadero.
Conocimiento que no es nombre
ni significado
ecuación, teorema o teoría
ni siquiera palabra consecuente.
Conocimiento que se
anida en la conciencia
en el espíritu informe.

Fuerza femenina
transparente y dulce
invitando al arte:
¡Ven, habítame!
¡Ven, enséñame!
¡Ven, juégame!

Lección que trasciende
fronteras
de razón,
amasando soledad y
pasión.
Amor y útero,
confianza y sueño.

Sazonando pensamiento
vida y cuerpo.